Sierra del Gallego: En el límite de la crisis por falta de agua

En el límite de la crisis por falta de agua

Corren por el agua En la Sierra del Gallego los casi 12 mil habitantes se miran unos a otros en busca del agua, ante la necesidad, los pobladores advierten que de no haber solución harán bloqueos Domingo, 04 Diciembre 2011 Fredy Ruiz Condori El Mundo de Córdoba Nadie quiere que se inicien los enfrentamientos por el agua. Pero la suciedad en los trastes, los uniformes sin lavar y la sed atorada hacen que se sequen las buenas intenciones en las 14 comunidades de la Sierra del Gallego, en Córdoba, y empiezan las advertencias de bloqueos y plantones. Tienen una semana sin agua, porque desde Guzmantla, en el municipio vecino de Ixhuatlán del Café, no permiten la reparación de una tubería rota. “Aquí no pasa Córdoba hasta que no nos den agua también a nosotros”, se quejan. Y las autoridades de ambos municipios miran al cielo dejando que se arreglen entre ellos. En cambio, en la Sierra del Gallego los casi 12 mil habitantes se miran unos a otros las caras en busca del agua. Beatriz Juárez ha llegado con sus dos pequeños para obtenerla de una toma de agua ubicada frente a la iglesia de Paredones, pero se tuvo que ir con los bidones vacíos, lo acumulado llegó a su límite. Se secó. Sólo algunos vecinos, entre ellos Constantina Juárez, lograron llenar unas pocas cubetas. “Yo siento que el agua es federal. Es de todos. Ellos (en Guzmantla) no tienen por qué mandar, por el hecho de que pase el agua por su carretera. La vía es de todos. No es mía, ni de ellos”, señaló con frustración ella. Pasando El Bajío, en el camino que lleva a Matlaquiahuitl, inicia Ixhuatlán, y la comunidad vecina por donde pasa la tubería proveniente de el manantial Los Berros, de donde La Sierra del Gallego obtiene el agua. “A Guzmantla no la tomaron en cuenta cuando firmaron ese convenio entre Jorge Sanchez (alcalde en el año 2000 de Ixhuatlán) y Hugo Fernández (alcalde de Córdoba en esa época). Por eso alguna gente aquí está sentida. Lo único que queremos es que se nos conecte una bomba de agua (de la red de Córdoba)”, indicó un vecino de Guzmantla. La agente municipal, María Cristina Ixtla, explicó que unos mil habitantes, “no están exigiendo”. Solicitan -dijo- una reunión con un representante del Ayuntamiento de Córdoba, con la autoridad de Hidrosistema y con los representantes de los comités de agua de la Sierra del Gallego para expresar su problema. Informó que obtienen el agua del manantial La Cueva, ubicado en ese municipio y que pagan 89 pesos mensuales a una junta que administra este proyecto, que es privado. Cuando se descompone la bomba de agua gastan, aseguró, unos 150 mil pesos, y cada habitante tiene que poner de su bolsillo para pagarlo. En 2010, recordó, se quedaron 4 meses sin agua. Es por ello que cruzaron hacia Córdoba en busca de sus vecinos de El Gallego a pedir la conexión. En Córdoba, como explicó Fresbindo Méndez, secretario de Ciudadanos Unidos en Defensa del Agua de la Sierra del Gallego, no accedieron a su petición porque todos los acuerdos ya fueron firmados en su momento. Sin embargo, aclaró, les ofrecieron a Guzmantla hacer una toma para ellos en el límite de ambos municipios. No llegaron a un acuerdo. Antonio Solís también llegó tarde a Paredones y ya no encontró agua. Aseguró que iría a buscar a otros vecinos quien le pueda dar un “tantito”. Mientras que en la casa de Hermelinda Cirila se empieza a ver las caras sin poder bañarse. En San José Loma Grande, Reyna Ramírez Orduña le preocupa no poder bañar a su bebé de tres meses. A unos 40 minutos dentro de Ixhuatlán está el manantial Los Berros, junto al río Jamapa, el agua discurre en abundancia. Pero no para los habitantes de Gallego, que buscan una salida a este problema.